20090227

Para gustos, colores

Que rico es el refranero español, ole! si señor, nadie puede decir a otra persona qué es lo que esta bien y lo que no. Pero todo el mundo sabe que hay una serie de persona conocidas como "marcadores de tendencias" también conocidos como "los más guays" que están por encima de la riqueza de la lengua castellana.

Los más guays son individuos que se dedican a dictar solemnes sentencias sin tener en cuenta el nivel de alcohol en sangre que padecen en ese momento sagrado, divino, supremo... ese momento en el que ellos hablan, disfrutan un montón escuchándose por cierto, y todo un séquito de insectos "chupa cámaras", seguidores de sus soberbias gilipolleces, los miran paralizados como si estuviesen escuchando la lectura de los mismísimos diez (o doce, o veinte) mandamientos musicales...

Es muy significativo que un humilde aspirante a situacionista, al igual que Ricardo y yo, como lo es Ignacio nos tenga que llamar la atención sobre un disco que pasó prácticamente inadvertido por "nuestra" piel de toro el año pasado. Y digo prácticamente porque los pocos que se fijaron en él lo pusieron a parir, seguramente si en lugar de proceder de Murcia (gran afición) hubiesen nacido en Manchestrer o Wisconsin (por ejemplo) estoy seguro que hoy estaría escribiendo del tiempo que hace en Castilla la Mancha.

Pero los guays prefieren que los artistas les sean cercanos, les adulen, se tomen combinados divertidos manteniendo despiertos sus egos mientras los codos de ambos intentan vencer a la barra en un claro gesto de amistad profunda que durará para siempre... para siempre que haya alcohol por medio y las críticas sigan siendo buenas...

En pleno parto, a la madre de Ignacio se le acercó el doctor y le dijo "...señora, su hijo viene bien situacionado..." Mexicana de carácter, a quien tengo el gusto de conocer, seguro que sonrió con serenidad. Evidentemente porque ya sabía que su hijo venía con la melomanía corriendo por sus venas... Aunque estoy seguro que ella hubiese preferido que cantase... como su tío...

En lugar de eso, éste tipo primero escucha y luego piensa. Una vez analizada y procesada toda la información entonces decide hablar... todo lo contrario que nuestros ya legendarios guays a quienes parece hacerles mucha gracia sentenciar entre risas, y los ecos de las risas de sus comparsas, lo primero que se les pasa por la cabeza sin pensar en la repercusión que esto puede tener...

Un poco más de respeto, eso es todo.

Puede que me equivoque, puede que el disco que nos recomienda nuestro mexicano favorito sea uno de los más pinchados en los clubes de moda, que no frecuento. Puede que esté en las bocas de las más influyentes tertulias dominicales... lo ignoro.

Como ejemplo aquí os dejo con un discazo que supera a la gran mayoría de los editados en 2004 y que por supuesto tuvieron una mayor repercusión que éste, en todos los sentidos... Además tiene en su interior una dedicatoria muy especial que hace que mi espina dorsal me recuerde que estoy más que vivo...














Vacazul "Vienen tiempos"

Besos para Quique Ruiz.

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